NOTAS PARA LA REVISION DE LA RUTA DEL QUIJOTE
Desde la publicación
de la novela don Quijote de la Mancha ha
habido cierta controversia en cuanto a la determinación de los pueblos por los
que el hidalgo debió pasar en cada una de las tres salidas y saber por donde
discurren sus aventuras. Varios autores han propuesto rutas, identificando los
lugares que Cervantes describe. No obstante, esas descripciones no siempre han
sido suficientes para sacar conclusiones definitivas.
Lo cierto es que la
gran mayoría de las aventuras transcurren en lo que hoy día es el territorio de
Castilla-La Mancha. En tiempos de Cervantes La Mancha estaba constituida por La
Mancha Baja, Mancha Alta y la Mancha de Montearagón.
La Mancha Baja situada al sur de la Submeseta sur, limita al anorte con los Montes de Toledo y la Mancha Alta y al sur con Sierra Morena, y se extiende principalmente por la provincia de Ciudad Real, incluyendo a las comarcas históricas del Campo de Calatrava y del Campo de Montiel.La Mancha Alta, es una comarca interprovincial, limita al norte con la Comarca de Las Vegas (Madrid), La Alcarria, la Serranía de Cuenca y La Manchuela; al sur, con las comarcas manchegas de Campo de San Juan y Campo de Montiel;; al Oeste, las comarcas toledanas de Torrijoss, Los Yébenes y Montes de Toledo; y al Este, las comarcas de La Manchuelaa y La Mancha del Júcarr.
La Mancha de Montearagón, es una región o comarca histórica, compuesta por las tierras meseteñas del sureste de Castilla, fronterizas con el Reino de Valenciaa, perteneciente a la antigua Corona de Aragón. Hasta el siglo XVI, recibía este nombre el sector más oriental de La Mancha, la cual conformaba junto a la Mancha Alta y la Mancha Baja La Mancha. La mayor parte de la misma se extendía por parte de las actuales provincias de Albacete y Cuenca, si bien también podrían incluirse en ella algunas localidades de las provincias de Ciudad Real, Toledo, Valencia, Alicante y Murcia.
Leyendo la novela con detenimiento Cervantes nos dice que la cuna de don Quijote se encuentra en una aldea del Campo de Montiel y que es de esta comarca lo dice al final del Prólogo con las siguientes palabras:
…la historia del famoso don Quijote de la Mancha, de quien hay opinión, por todos los habitadores del distrito del campo de Montiel que fue el más casto enamorado y el más valiente caballero que de muchos años a esta parte se vio en aquellos contornos.
El distrito o comarca del Campo de Montiel tiene por tanto una especial incidencia en el Quijote, ya que es mencionado en cinco ocasiones y refrendado con el añadido de y era verdad que por él caminaba, lo que hace que algunos autores lo cuenten como seis ocasiones. Por designio de su autor efectúa expresamente el comienzo de la Primera salida la andadura por este antiguo y conocido Campo de Montiel. Sin embargo la doctrina cervantista ha omitido durante siglos la ubicación geográfica del inicio y fin de las tres salidas de don Quijote. Olvidando a la comarca del Campo de Montiel y por tanto dejándola marginada de los estudios y rutas, pero no de quien ha hecho una lectura literal y objetiva del texto de la novela. En contadas ocasiones se ha tenido en cuenta el mapa del Campo de Montiel existente en las Relaciones Topográficas de Villanueva de los Infantes, dado el 7 de diciembre en 1575, el cual se conserva en la Biblioteca del Escorial. El geógrafo Fermín Caballero en 1872 da a conocer este mapa para demostrar cómo el Campo de Montiel es el escenario de las salidas del héroe manchego, eternizado por la pluma de Cervantes. Lo adjunta para consideración de los cervantistas porque en él está las localidades que componía el Campo de Montiel.
Luego el principio fundamental y racional es
ajustarse a esta parte de la geografía de La Mancha, basada en lo que el texto
expresa y justifica el topónimo del personaje principal don Quijote de La Mancha y
especialmente en La Mancha Baja donde se encuentra el distrito del Campo de Montiel. Todo escritor como norma general sitúa un lugar en el que se
va a desarrollar su acción y este procedimiento es seguido por Cervantes.
ANTECEDENTES DE LA RUTA DE DON QUIJOTE
Históricamente la Ruta
del Quijote nació a mediados del siglo XVIII, cuando Carlos III encargó
a su geógrafo Tomás López la realización de un mapa basado en las observaciones
del capitán de Ingenieros Joseph de Hermosilla de los caminos recorridos por Don Quijote. La Real Academia Española
encargó al cervantista don Vicente de
los Ríos la supervisión de la edición de
1780 del Quijote, y el
mapa delineado por Tomás López, geógrafo
de S.M., supuestamente datado en 1765 se incluyó en la edición, declarándose
oficialmente la Ruta del Quijote.
El cervantista Juan Antonio Pellicer entre
1797 y 1800 presentó algunas variantes sobre este mapa. Ambas rutas son la base
de nuevas versiones y ediciones. En 1960 esta propuesta de la Academia y de
Pellicer fueron revisadas por José Terrero en su libro las rutas de las tres salidas de don Quijote llegando a la
conclusión de que el punto de partida es un pueblo perteneciente al Campo de
Montiel, quedando descartada Argamasilla por no pertenecer al Campo de Montiel.
Los parajes por donde
se dice que anduvo don Quijote y los sitios de sus aventuras identificados en
el mapa de Tomás López, tienen su inicio en Argamasilla de Alba, Pellicer lo
atribuye igualmente, aunque muchos son los que han dado como el supuesto lugar
a este pueblo como el inicio y fin de las aventuras, no todas las rutas han
sido interpretas de la misma manera, aunque hayan seguido la carta geográfica
de Tomás López o la revisada por Pellicer.
En 1905 el
historiador Antonio Blázquez publicó La
Mancha en tiempos de Cervantes donde particularizaba los lugares manchegos
por donde anduvo don Quijote. Se
preguntaba qué era La Mancha en la época de don Quijote: "Todos sabemos lo que es hoy; algunos
ignoramos lo que fue; muchos identifican escenas y pasajes con lugares de aquel
entonces, quizá sin prueba cierta y convincente; mas no todos nos damos cuenta
exacta del territorio y de su vida, de sus productos y caminos, de sus
tradiciones y leyendas". Este
autor señala que Campo de Montiel comprendía “desde el Ayozo, bastante al sur de Argamasilla de Alba, y cerca de
Manzanares y Membrilla hasta Beas, Santisteban y Montizón, en la provincia de
Jaén, llegando por Levante a abarcar casi todas las lagunas de Ruidera, el
pueblo de la Osa de Montiel, la ermita de san Pedro, la cueva de Montesinos y
el castillo de Rochafrida”.
En este mismo año el
escritor y crítico literario Azorín emprendió su viaje por La Mancha, sus pasos
le llevaron inicialmente a Argamasilla de Alba, el supuesto lugar de la Mancha. Dejó sus impresiones
periodísticas. Viajes inspirados en los sentimientos nacidos por la lectura de
la novela, como anteriormente lo había hecho en 1896 A. Jaccacci, que vino
exclusivamente desde Estados Unidos a hacer la Ruta de don Quijote
fascinado por la lectura de la novela dejó sus impresiones en el libro On the trail of Don Quijote (Nueva
York, 1896). Incluye ilustraciones de algunos pueblos de antiguo y conocido
Campo de Montiel (Ruidera, Villahermosa y Montiel), magnificas ilustraciones
realizadas por Daniel Urrabieta Vierga. Aproximaciones imaginarias con el
argumento de que cualquier recorrido por La Mancha permitiera descubrir el alma
manchega, sus tradiciones y por ello cualquier ruta era buena y el itinerario
de la Real Academia para los lectores les permitía conocerlos. Lógicamente se optaba
por los lugares que tradicionalmente han gozado de más favor, marginando para
el olvido las cinco veces que Cervantes puso con todas las letras Campo de
Montiel.
Desde ese momento
hasta nuestros días, el trazado de la Ruta ha levantado grandes polémicas entre
los estudiosos del Quijote y
lamentablemente aún no existe un consenso sobre cuáles fueron los caminos por
los que transitó el Ingenioso Hidalgo y por lo tanto del lugar de la Mancha. De este modo, cada nuevo estudio viene a
desmontar un punto u otro de la teoría anterior y cada investigador incluye una
serie de localidades y excluye otras.
El general de
División del cuerpo de Ingenieros Rafael Peralta Maroto en los comentarios
sobre los puntos oscuros del Quijote, esboza la Geografía del “Quijote”, en el que intenta ajustar el texto al mapa
de las comarcas por donde va don Quijote a buscar sus aventuras. Este autor se
encuentra con la primera y principal dificultad, la ignorancia con la que todos
los estudiosos se topan, hallar la patria de don Quijote, la cual no quiso
dejar en el texto Cervantes. Para este estudioso
la solución se decidió muy a la
ligera de que fuese definitivamente
Argamasilla de Alba el lugar. No le acaba de convencer encontrando el primer
motivo en que Argamasilla no es del Campo de Montiel, pero acepta la hipótesis
y lo deja bajo la responsabilidad de la Academia y por tanto inicia las tres
salidas desde este lugar. Se pregunta que quien puede ser don Quijote y
manifiesta que hombres del tipo de don Quijote, con una biblioteca tan
excelente y especializada no es verosímil se pudiera encontrar en este pueblo,
más natural sería que un hombre como este residiera en una ciudad, por ejemplo,
Infantes que da la casualidad que se halla en pleno Campo de Montiel y las
distancias concuerdan muy bien con las que dice el texto. Traza croquis y
recorre los lugares que supuestamente hizo don Quijote en la Primera salida.
Como ha aceptado que sea Argamasilla no le cuadra la conversión hacia el norte
desde este pueblo, ya que el campo de Montiel está situado en el sur de
Argamasilla y el texto dice que empezó a caminar por el antiguo y conocido Campo de
Montiel, y era verdad que por él
caminaba. A pesar de ello traza las tres Salidas con sus respectivos
croquis y trata de seguir el texto consiguiendo trazar su particular Ruta del
Quijote sin localizar en el Campo de Montiel ningún lugar por donde don Quijote
inició sus aventuras.
Fernández Nieto, Catedrático de Literatura de la
Universidad Complutense, manifiesta que la razón más convincente para explicar
la indeterminación del lugar de partida de don Quijote es de tipo literario. En
la primera parte manifiesta este filólogo que por el Campo de Montiel
llega en su primera salida a una venta donde es armado caballero. Aclara este
autor muy acertadamente en una nota, que en alguno de los estudios sobre las
rutas quijotescas se utilizan para demostrar hipótesis, la preposición hacia
(el Campo de Montiel) en lugar de por el Campo de Montiel que es lo que dice el
texto del Quijote, con lo cual cambia por completo el significado. Este autor
continua diciendo: "En la Segunda Salida, también por el Campo de Montiel,
llega a la venta de Juan Palomeque; después se interna en Sierra Morena,
regresa por la misma venta y acaba en el punto de partida:
…Pisó
por ella al uno y otro lado de la gran Sierra Negra, y el famoso Campo de
Montiel, hasta el herboso llano de Aranjuez, a pie y cansado. (Parte I - capítulo 52).
En la Segunda Parte, -la Tercera Salida-, sale del
mismo punto, del Campo de Montiel, se dirige hacia el Toboso, vuelve al Campo
de Montiel, por el pueblo del Caballero del Verde Gabán, quiere visitar la
famosa cueva de Montesinos. Quiere ir a
Zaragoza pero antes se dirige a la cueva
de Montesinos. Castillo de los Duques, cerca del Ebro. Seguidamente Barcelona,
regresará por el Castillo, pasará por un mesón y acabará en el primer punto de
partida:
... que desde este
punto comienzan las hazañas y donaires de don Quijote y de su escudero;
persuádeles que se les olviden las pasadas caballerías del Ingenioso Hidalgo, y
pongan los ojos en las que están por venir, que desde agora en el camino del
Toboso comienzan, como las otras comenzaron en los campos de Montiel, y no es
mucho lo que pide para tanto como él promete;… (Parte II, capítulo 8).
En 1999 surgió una
iniciativa particular impulsada por don Justiniano Rodríguez Castillo en el que
traza una ruta del Quijote de las aventuras de los capítulos de la novela que
transcurre en La Mancha antes de su viaje a Zaragoza y Barcelona, y
particularmente en el Campo de Montiel. Rodríguez Castillo se decide a trazar
esta ruta motivado por las reiteradas veces que Cervantes menciona El Campo de
Montiel y ninguna ruta hasta la fecha transcurren por el mismo. El mismo alega que sin pretensiones de ser la
definitiva y sólo como hipótesis para mover a los estudiosos y profesionales a
situar la cuestión donde debe estar, ubicando las aventuras de don Quijote
donde su autor dice y donde él cree que deben situarse. En su andadura por
ganar una parte de esta batalla, Rodríguez Castillo participó tratando de
defender en todos los foros (Congresos, Jornadas, Conferencias….) la difusión
el Campo de Montiel. Consiguió que en la edición revisada y anotada por el
filólogo Francisco Rico, de la Real Academia Española y de la Asociación de
Academias de la Lengua Española, situara por primera vez en nota la ubicación
del Campo de Montiel una comarca dentro de La Mancha entre Ciudad Real y
Albacete, lo que supone hacer ver a los lectores que este distrito que menciona
Cervantes no es imaginario, sino real. Logro con la ayuda de las autoridades
locales de Villanueva de los Infantes que el IX Coloquio Internacional de la
Asociación de Cervantistas se celebrase
en esta ciudad. Algo se empezaba a mover, por fin para poner en su sitio a esta
comarca.
Don Justiniano
Rodríguez Castillo anhela interpretar el texto como Cervantes dice, por conocer el territorio y fijar los
puntos geográficos exactos. Tratará de
llegar a una aproximación siempre problemática y discutible por movernos en el
campo literario, por lo que no se ajustará con exactitud geográfica-histórica.
Exige como primera condición que la ruta se haga por donde el autor dice
acogiéndose a las cinco menciones que Cervantes escribe sobre el Campo de
Montiel. Asume la norma cervantina de no citar, salvo excepciones (El Toboso,
Cueva de Montesinos y Barcelona) los lugares donde no están nunca, ni siquiera
la patria de don Quijote. Reconoce que no es un estudioso especializado en el
tema, es más considera de una vanidad insolente y pedante corregir o
interpretar el texto de la novela, por lo que insta a que se realice un estudio en profundidad
del tema, tratando de fijar una ruta lo más exacta posible e investigar las
lagunas existentes en el conocimiento de la obra cumbre. Que se sienten las
bases para una ruta creíble a la luz de los nuevos conocimientos. Lanza el reto
a los estudiosos para que en el año 2005 se tenga una ruta veraz y sea
declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. Diseña una ruta con las
tres salidas, pero al no encontrar otro pueblo manchego más ajustado para
patria de don Quijote acepta la doctrina oficial de la Academia y las aventuras
comenzaran en este punto, lo justifica por la extrema proximidad al Campo de
Montiel. Podríamos decir que es lo
admitido expresa para su justificación.
En su propuesta deja por tanto fuera al Campo de Montiel como inicio y fin de
las aventuras, tal y como defendía y argumentaba en la introducción de su
obra. En la Primera salida en el Campo
de Montiel para él no tiene lugar en el mapa ninguna aventura. En la Segunda y Tercera
salida acogiéndose a los escasos datos que la novela da sobre los lugares
casará o cuadrará el relato cervantino por coincidir una serie de detalles
geográficos, históricos, etnográficos, de léxico, etc. colocándolos en lugares
verosímiles o ciertos. Por aceptar la postura oficial de la Academia, tal y
como también hiciese Peralta Maroto, ambas rutas no se ajustan a la veracidad
del texto, pero despertó concienzación en los habitadores del famoso y conocido
Campo de Montiel. Constituyéndose para su defensa la Asociación Amigos
del campo de Montiel difundiendo y participando varios de sus miembros en
diversos medios como en el Boletín de la Real Sociedad Geográfica, año de la
conmemoración del IV Centenario de la publicación de la Primera parte del Quijote.
Como se
ha visto, los estudios dedicados a lugares y rutas en el Quijote son numerosos y no siempre bien considerados. En el año
2005 tuvo un gran impacto el estudio científico por un grupo interdisciplinar
de catedráticos de la Universidad Complutense y otras Universidades para hallar
el lugar del que Cervantes no quiso acordarse.
A través de un método científico, -poco corriente en el estudio del Quijote- se contempla un variado número
de perspectivas o soluciones para
analizar el objeto de estudio desde la mayor variedad de puntos de vista
(Teoría de sistemas, Análisis de contenido y Análisis sociocultural). Los
resultados dan a Villanueva de los Infantes como el lugar de la Mancha escogido por Cervantes. Sorprende a algunos que sea este pueblo por su poca tradición
cervantina. Otro estudio realizado por otras Universidades (Málaga y Valencia) han
empleado un modelo estadístico, basado en la teoría de la decisión multicriterio.
Sus resultados, al igual que el anterior, da a Villanueva de los Infantes como
el lugar de la Mancha. Estudio
refrendado por el Premio Cervantes en el año 2012 por el poeta don Nicanor
Parra, es físico y matemático, en su discurso de la entrega del premio.
Abierto el
debate del trabajo científico
interdisciplinar El lugar de la
Mancha…El Quijote como un sistema de distancias/tiempos., no se han
presentado hasta la fecha trabajos refutables para que la nueva teoría sea
retirada o no tenida en cuenta. Los cervantistas pusieron en duda la veracidad
del descubrimiento y los científicos quisieron zanjar la polémica invitando a
los críticos a explicar y demostrar el fundamento de las mismas y animar a los
lectores que participen activamente en las mismas. Por ello publicaron el libro
El enigma resuelto del Quijote: un debate
sobre el lugar de la Mancha con la participación de críticos y nuevos
documentos
De aquí que sea
necesario una revisión oficial de La Ruta donde se tenga en cuenta al Campo de Montiel como origen de El Quijote y las últimas
investigaciones científicas al respecto.
Mª Ángeles Jiménez
García
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