sábado, 24 de enero de 2015

TODOS QUIEREN SER EL "LUGAR DE LA MANCHA"





       Cervantes en el prólogo de la novela Don Quijote de la Mancha, al dirigirse al desocupado lector reflexiona sobre la libertad de pensamiento en las personas frente a los poderes establecidos. Se describe perplejo, pensando en cómo escribirlo, cuando aparece un amigo. Mediante un diálogo con este amigo imaginario de cómo hacerlo, el autor se presenta al lector y explica lo que pretende con su obra y con sus dos principales personajes. Al final del mismo Prólogo, Cervantes elogia el carácter de ese hidalgo desconocido aún por los lectores, pero recordado siempre por los habitadores del distrito del Campo de Montiel como el más casto enamorado y el más valiente caballero que de muchos años a esta parte se vieron en aquellos contornos.

Desde antiguo se ha intentado situar el lugar de la Mancha dentro del término de esta zona. Algunos teóricos de la literatura han opinado que ese lugar era puramente imaginario. No obstante, está claro que Cervantes sitúa a su personaje en el Campo de Montiel, siendo este distrito escenario de algunas de sus aventuras; así está escrito con todas las letras, no se puede ni negar ni arrancar las páginas reveladoras.
En los últimos meses ha sido noticia en periódicos y revistas nacionales, -buscando quizá la notoriedad de la celebración del IV Centenario de la Publicación de la Segunda Parte del Quijote- hallazgos de procesos judiciales, pleitos, actas bautismales, libros ocultos y mil cosas más relacionados con los personajes más importantes, la pericia geográfica de la novela y e incluso datos del autor.
Es sabido que Alcazar de San Juan conserva una partida de bautismo de un tal Miguel de Cervantes, con ella se disputa la patria con Alcalá de Henares. La partida de bautismo de Alcalá está fechada un 9 de septiembre de 1547, en ella se describe que fue bautizado Miguel, hijo de Rodrigo de Cervantes e su mujer doña  Leonor. La partida de bautismo de la parroquia de Santa María La Mayor en Alcazar de San Juan es del 9 de noviembre de 1558, en ella se dice que bautizó el Rdo. un hijo de blas de Cervantes Sabedra y de Catalina López que le puso de nombre Miguel.
Once años le quitan o le ponen al autor del Quijote, depende del interés del investigador o lector. El convencimiento por una ciudad u otra nos la da el documento del Archivo Histórico Nacional que se encuentra en el libro de redención de cautivos de los trinitarios, donde hay una descripción biográfica de Cervantes del 19 de septiembre de 1580 por un escribano público, el cual dice el muy reverendo padre Fray Juan Gil, redentor susodicho, rescató a Miguel de Zervantes, natural de Alcalá de Henares de hedad de treinta a un años, hijo de Rodrigo de Cervantes e doña Leonor de Cortinas, vezina de la villa de Madrid; mediano de cuerpo, bien barbado, estropeado de el braço y mano izquierda captivo en la galera del Sol yendo de Nápoles a España…
La crítica intentando hallar personajes  reales  en los que Cervantes pudo basarse para pergeñar su héroe, ha buscado individuos de la época que tuvieran un nombre parecido o se comportaran de forma extravagante. Se ha hablado así de un pariente de doña Catalina de Salazar, esposa de Cervantes, procedente de Esquivias, llamado Alonso Quijada. Recientemente también se ha difundido la noticia del hallazgo del acta bautismal de Sancho en esta ciudad, alegando un documento que aparece un tal Sancho. Nombres muy comunes en toda la Mancha y en Castilla. Se ha especulado con un hidalgo demente llamado Rodrigo Pacheco de Argamasilla de Alba. Otros como Rodrigo Quijada del Quintanar de la Orden, Francisco de Acuña procurador del Toboso y los de Villaseñor.  Francisco Suarez de Gasco en Corral de Almaguer, Hinojosas, Mota del Cuervo  e incluso Toledo. Elucubraciones que todo el Común de la Mancha reivindica como suyo ese lugar de la Mancha del que Cervantes no quiso acordarse…. Pero ninguno de ellos es convincente.
 En 2007 se publicó en diversas revistas, libros y otros medios un documento que podría tener relación con el personaje cervantino. Un pleito encontrado en el AHN contra un vecino de Villanueva de los Infantes entre 1520-1523 llamado Juan de León, del que decían los infanteños “tener el celebro seco de poco dormir”, los testigos que se llamaron dijeron “ser hombre educado, pero su locura y extravagancia en el vestir junto al manejo de las armas para deshacer entuertos o desavenencias entre los vecinos, vestía de forma extravagante con calzas viejas ajustadas a las piernas y camisa vieja sobre ella una malla de soldado medieval vieja y rota, con una espada desnuda en una mano, y en la otra una ballesta armada y en ella puesta un rollón y un charcal, dando arengas a los vecinos..” ...condenado a destierro y cárcel por el plazo de tres años, durante este tiempo recorrió pueblos y ventas para poder comer, acompañado de otro vagabundo llamado Juan de Portillo, siendo prendido a las orillas de Villanueva de los Infantes..”.
           Pleito o apelación iniciado por una tía de Juan de León para dar justicia a su sobrino, por no haber hecho delito público ni secreto, contra Juan de la Cueva, alcalde mayor que fue de este partido del Campo de Montiel, el cual mandó ahorcar sin quererle oír descargo alguno, haciéndolo sin justicia con poco temor de Dios y del oficio que representaba. De esta manera la Justicia fue temida, la cual antes de su muerte era muy menospreciada e tenida en poco... e con la muerte de Juan de León quedó en paz y sosiego en toda la provincia, por ser un hombre malviviente, e sedicioso e alborotador...
Documentos que fueron mostrados en el congreso de Alcazar de San Juan el pasado noviembre bajo el título “Juan de León un hecho histórico en el s. XVI” expuesto por don Clemente Plaza. Jornadas de estudio y divulgación cervantina sobre El lugar de Cervantes & El lugar del Quijote donde se expusieron distintas teorías sobre los secretos cervantinos, sobre todo del Común de La Mancha, los cuales llevan como posesión innata el legado de Cervantes por llevar el topónimo de La Mancha incrustado en el nombre del legendario hidalgo. Llegando a declarar algunos ponentes que el Campo de Montiel no fue Mancha, pero sí Daimiel, Alcazar, Quintanar, Urda, Argamasilla fueron del Campo de Montiel.
Se tiene la memoria frágil y a veces se pierde la perspectiva de lo publicado -y hete aquí-, nos encontramos con publicaciones que más que novedosa es un posible plagio. Los medios buscan audiencia, lectores y notoriedad. El pasado 5 de enero en el periódico El País en el artículo bajo el título Tras los nuevos pasos de don Quijote nos devela los hallazgos de documentos desempolvados por una arqueóloga y un archivero. Un tal Rodrigo Quijada que tenía un escudero…y era temido Procurador  del Quintanar, capital administrativa de la zona, con facultad de impartir justicia... Además de otros dos procesos judiciales de los pueblos de Miguel Esteban, El Toboso y Quintanar. Pleitos y hechos ocurridos en estas localidades que relacionan con apellidos que aparecen en el Persiles de Miguel de Cervantes: Villaseñor y De Acuña, vestido con armadura y demás elementos a la usanza caballeresca…donde Las lagunas de Ruidera las ubican en la laguna de Manjavacas en Mota del Cuervo…cerca la venta donde es armado caballero…Salvan de la  tradición  la aventura de los molinos ubicada por algunos estudiosos en Campo de Criptana; cuando todo lector del Quijote sabe que de la lectura literal del capítulo 7 de la primera parte enlazada con el capítulo 8 cuando inician la segunda salida toman la misma derrota y camino que el que había tomado en su primer viaje, que fue por el Campo de Montiel  y descubrieron treinta o cuarenta molinos de viento que hay en aquel campo. Hay que aclarar que Cervantes no menciona nunca ni Quintanar de La Orden ni Campo de Criptana, pero sí Campo de Montiel.  Luego el “lugar” se encuentra dentro del perímetro de esta comarca y se puede visualizar en el mapa de las Relación Topográfica de Villanueva de los Infantes de 1575 mandadas hacer por Felipe II, custodiada en la Biblioteca del Escorial.
La Mancha existe, es real; el Campo de Montiel también. Al igual que existe "Mágina" y "Macondo" como lugares de la geografía literaria de los escritores universales, Antonio Muñoz Molina  y Gabriel García Márquez en sus novelas respectivas El Jinete Polaco  y Cien años de soledad. Con la diferencia de que Campo de Montiel es un lugar literario real; se puede, visitar, estar y pasear por él.